FRÓMISTA Y EL OLE: LA EMOCIÓN DE UN PUEBLO
Las
imágenes de la “Salida de EL OLE”, son suficientemente explícitas, ya que
muestran la espontaneidad y emoción que se desata nada más abrirse el portón de
San Pedro y aparecer el Vítor en manos del Mayordomo.
Este
año, además, puede hablarse de cantidad de personas como hacía tiempo no se
recordaba. La bonanza de la temperatura al filo de las 22 horas facilitó que
todo el pueblo y muchos amigos y visitantes de fuera estuvieran presentes.
Este
año hemos colgado en las redes el video y la grabación de la retransmisión de
la Salida de EL OLE, sin ningún comentario adicional, por innecesario. Esas
imágenes transmiten muy bien “la emoción de todo un pueblo”, volcado con su
celebración más emblemática y esperada.
Reiteramos
aquí el enlace para que se pueda volver a disfrutar de nuevo de esos momentos
inigualables de las Fiestas, seguramente los más esperados cada año.
Éxito de la retransmisión
de la salida de EL OLE
El
pasado 16 de abril, a las 22 horas, un centenar de personas se conectaron para
ver en directo la Salida de El Ole. A
fecha en que cerramos esta reseña, se llevan acumuladas 1347 visualizaciones
del video de la retransmisión y seguirán creciendo.
El Sermón y El Ole vuelven
a su lugar tradicional
Se reparte “caña” a
diestro y siniestro, y parece que eso gustó al “populacho”.
Junto a Carmen Muñoz, debutó como Chiborra Raul Guadilla, que superó
la prueba con nota. Luis Santos tenía cometido mayor, portar el Vítor, en su
condición de Mayordomo.
Había
expectación este año por lo que daba de sí el tradicional “Sermón
satírico-burlesco”, ya que el de 2022 hubo no pocas críticas, al parecer más un
popurrí de anécdotas en estrofas de los años 20 y 21, que no pudieron emitirse
por no haberse celebrado El Ole.
Escuchado
“in situ” pareció ameno, variado, no sólo irónico, porque sobre todo resultó
“cañero”. Como alguno ha expresado jocosamente, “no quedó títere con cabeza”.
Hubo
aportaciones suficientes de estrofas, en gran parte enviadas de forma anónima,
lo que es habitual. Y se recuerda que
la Comisión Pro-Sermón trabaja con autonomía y no está sujeta a “censura”.
En otro tiempo tal vez lo “conocían” el alcalde y el cura, como decía la
letrilla tradicional. En los tiempos que corren, no ha lugar a la censura.
“No haber ofendido a nadie…” era la
intención, seguro, pero… hemos recibido
un par de quejas, por considerar exceso en alguna manifestación.
Desde aquí la Cofradía pide disculpas
a quienes se hayan podido sentir agraviados. Y queremos que se entienda que, en
esas sutiles reglas de funcionamiento enunciadas -que la Comisión Pro-Sermón
resuelve con mayor o menor acierto un año sí y otro también- se sustenta la
pervivencia de esta tradición inherente a “El OLE” que es el “Sermón
Satírico-Burlesco”, que no podemos dejar que desaparezca.